Articulado en tres textos diferenciados, el presente libro aborda asoectos vinculados con la renta básica y con la movilización por su reconocimiento como derecho de todas las personas. En la primera parte se hace un repaso a la historia reciente y a la situación actual de las movilizaciones en el Estado español.
En la segunda se recogen, a partir de dudas y críticas surgidas sobre la renta básica y su viabilidad, nuevos argumentos y reflexiones que refuerzan el armazón teórico de la propuesta. Finalmente, en la tercera parte se analiza la situación en América Latina, tanto en lo referente a las causas de la actual situación económica, como en lo que respecta a las propuestas existentes y la posibilidad de insertar la renta básica en las agendas políticas en esta región del planeta.
Hay que decir que la llegada de esta recensión me ha ofrecido la ocasión de hacer unas cuantas reflexiones nuevas en dos sentidos. Una, como es obvio, ha sido intentar responder a las críticas que, muchas en forma de preguntas o dudas, se me hacen. Pero, la otra, y esta sí que es más atractiva, ha consistido en aprovechar esta oportunidad para profundizar en algunos de los temas objeto del debate. Precisamente, y dicho sea de paso, el doble papel que desempeña la crítica, incluso cuando pienso que se la utiliza para fines más perversos, es que nos permite rectificar cuando erramos, pero también darnos cuenta de los multiples matices que tiene cada dimensión de la RB, pero que por distintos motivos los dejamos sin desarrollar, o porque todavía están verdes en nuestra reflexión.
También hay que manifestar lo gratificante que es que alguien se tome la molestia de leer el trabajo de uno y, todavía más, si ese alguien se decide a añadir los comentarios buscando “un espíritu de respeto y discusión abierta”. Esto nos compromete a que, en el ejercicio de la crítica que se ha de hacer en los debates, respetemos sus propias normas, sus propias exigencias: es decir, la crítica ha de venir cargada de argumentos, contener muy pocas opiniones, y desde luego, ninguna descalificación. Choca ver como estas reglas, que parecen ser del dominio público, pocas veces son observadas. Y más frecuentemente ignoradas por los que, en los presuntos debates, hacen que las objecciones acaben en meros reproches, en desnudos intentos de descalificación del oponente. De todas formas, estas reflexiones me van a permitir decirle al lector que ya esté habituado al tema, que esta es una ocasión para releer algunos aspectos de la RB y comprobar la riqueza de sus componentes, muchos de ellos frecuentemente enunciados pero no desarrollados en toda su extensión; y lo mismo al lector que no esté tan familiarizado con la RB, que quizás este texto le sirva para leer y despertar el interés y buscar en textos más sencillos realizar una primera lectura a fondo de esta singular propuesta. Por una y otra razón, las páginas que siguen tienen también una intención didáctica, lo que lleva a prolongarlas un tanto más, ya que pretendo utilizar el deseable debate para ayudar a entender algunas de las complejidades del tema.